miércoles, 23 de enero de 2008

Me paso de rosca.


De vez en cuando no puedo evitar quedarme atascado (ser tartamudo mola más de lo que os imagináis... pero no me refiero a ese tipo de atore) cuando pienso, cuando analizo, cuando calculo. Supongo que será debido a la obsesión que me embarga por el "Nosce te ipsum" o "Conócete a ti mismo". Es posible que lo que necesite en esas ocasiones sea meditar (volverme Zen) y alejar esos pensamientos que se me atragantan para conseguir la claridad mental (meditar no es pensar, si no todo lo contrario -como Lostnilwen me dice-). Sí, es posible. Porque a lo mejor así podría postear más a diario sin masticar hasta la saciedad cada idea hasta que la encuentro digna de ser comunicada. Porque seguramente necesite confíar un poco más en mis impulsos, en mis instintos... porque a lo mejor así me sentiría un poco más humano y un poco menos pelusa, un poco menos títere, un poco menos lector de mi personaje de ficción. Con esto me refiero a que muchas veces fuerzo la rosca de la tuerca creyendo que dándole más vueltas se sujetará más fuerte... Y siempre hay cosas a las que dar vueltas, por tanto si uno ya es vicioso por naturaleza (sí, unos son altos, otros pelirrojos... y otros viciosos) es más fácil coger el vicio de la reflexión compulsiva. Y mira que hace tiempo que me propuse ser un poco más software y menos hardware... pero al final, en mi caso, el procesador prevalece.
Y cambiando de tema... ¡que se me va la Miry a las Tierras Plateadas, a Argentina durante 15 días! Mira que te tengo envidia, chata... ya te veo por allí haciendo que los pobres mortales se postren a tus pies, ¡oh, alabada seas!... te echaré mucho de menos (no sabes cuánto).
Bueno, pues ya no tengo más ganas de escribir y aunque sé que no es muy digno despedirse así, así me despido hasta la próxima.

martes, 15 de enero de 2008

A2sa2


Si sumamos las locuras literarias de dos seres incomprendidos sale esto:

"Una vez, sólo una, se atrevió a tocar la superficie de sus pesadillas posando en ella la yema de sus dedos. Una vez, sólo una, habló directamente con Miedo cuando tiró de la historia de sus manos aquél día para llevarle hasta él. Su pretensión no era otra que la de entenderse y su ilusión no era otra que la de perderle de vista, porque ya no le apetecía nadar en estanques obscuros sin fondo ni orillas. A veces la realidad hendía sus labios como verdades de algodón y hierro. Entonces no quedaba más remedio que mirar al derredor y caer en los círculos concéntricos de las gotas de agua que, disminuyéndose, asemejaban sus ojos (los del Miedo). Ojos que ahora le apuñalaban directamente y le entrelazaban al orden confuso de su presencia. Que le interrogaban sabiendo sus respuestas de antemano porque Miedo conoce los errores de todos. Una voz (o cientos de ellas) escupió palabras encima suya y pensó: Me ha hablado y es el momento de echarle de mi vida porque tengo un idiota dentro de mí, como Panero, como tantos… que no sabe y que espera encontrar las respuestas sin jugarme una sola noche en habitaciones perdidas de padres donde dejaríamos la luz que el ansia por reconocernos nos hizo cosechar. Y desechar oportunidades como ésta sería repetir el mismo error que hasta aquí me ha arrastrado. No quiero ser idiota, ni Panero, ni como tantos... y no sé si quiero ser según lo que entiendo que significa ser. Sólo intento desprenderme de los garfios que me duelen y que cortan mi respiración. Caminando por las calles enmusgadas, por los mástiles de la ciudad, olvidando lo pasado e intentando superar la miserable capa de tristeza encontrando a alguien que me cohabite en este planeta abandonado que soy yo mismo. Y como he llegado hasta aquí, no voy a darme la vuelta como tantas veces he hecho y voy a enfrentarme a ti como te mereces y me merezco. Tú que fuiste luz y abismo, odio y amor, belleza y asco, te mereces, como nadie que conozca, que te lleven por la senda de las espinas, que te hagan cabalgar por la pena, que sucumbas a la duda y al pecado que tanta veces creaste. Y mirándote a los ojos, por fin, pude arrancar tus ojos de esa mirada y verte, aleluya, como la triste persona que siempre has sido. "

(Fdo. Lostnilwen y Alcaudón)

Siempre quedan.


Muchas veces he lamentado haber perdido lazos con gente con la que compartí mi vida. Personas que han crecido contigo y tú con ellas, que te han dado su lado bueno y han soportado tu lado malo. Durante el paso de los años pienso que tus circunstancias te hacen escoger caminos que por lo general te alejan de algunos y te acercan a otros. Esto es en cierta forma inevitable.
A veces miro hacia atrás, me miro a mi y encuentro que soy una especie de crisol de los que han sido mis amigos (es normal, las personas influyen en ti) y de los que lo son. Se intenta asimilar cosas buenas y divertidas de los que te rodean y estoy orgulloso de haber pasado por la vida de gente que sin pensármelo me gustaría volver a ver. Añoro muchas cosas de mi pasado (supongo que como todo el mundo) lo que no significa que no adore sin dudar lo que hoy me rodea. Y supongo que si tuviera otra vida me gustaría que fuese exactamente igual que la que he tenido, incluso con sus cosas malas (aunque habría algún error que me gustaría cambiar). Piedra sobre piedra construiría de la misma forma el planeta en el que vivo y en el que soy y ataría algún cabo que otro que me ha quedado suelto en esta vida.

Divago:
Vivo en el polvo que flota suspendido en el vacío de la abstracción y con él viajo a donde un empujón de realidad nos lleva. Vivo retando a la continuidad de lo cambiante y rezando porque no cambie el reto de tu continuidad en lo vívido. Vivo muriendo por recoger algún trozo de nube de arena, de arena de sueño, de 'sueño despierto'. Muero viviendo en la sombra y me asombro buscando entre escombros la pluma de un ave inventada. Visto con frases extrañas que he visto en mis ciegas entrañas y mezclo la vida y la muerte agitando mis manos borrosas. Borro la vida, me invento una nueva, la pinto y me llueve y la vuelvo a borrar... Vivo en el polvo que muere agotado a los pies del tejido difuso de un caballito de mar. Acudo desnudo hacia el nudo de un lienzo lloroso que chilla una nana entre dientes de sal... borro mi vida, me invento otra nueva la miro cansado y la vuelvo a borrar.

viernes, 11 de enero de 2008

Cobardes.

Hace mucho tiempo que algo que haya visto no me ha sentado tan mal como lo que por desgracia hoy me he visto obligado a sentir. Al ir a entrar en el metro, y mientras el repartidor del ADN extendía su periódico hacia mi, un sonido terrible de ruedas quemándose en el asfalto ha hecho que girase la cabeza en dirección a la carretera, haciéndome testigo de un atropello brutal. Un coche grande, del que por desgracia no sé ni marca ni matrícula ha embestido a una señora de unos 60 años arrastrándola por la carretera unos cuantos metros y sin pensárselo se ha dado a la fuga. Dios mío, ójala hubiese podido coger esa matrícula o salir corriendo tan rápido como para alcanzar el coche, abrir la puerta del conductor y dejarle en coma a base de patadas en la cabeza al maldito hijo de puta (porque no tiene otro nombre, aunque su madre no tenga la culpa), aunque supongo que ha sido mejor correr hacia la señora para socorrerla. No voy a dar detalles escabrosos aunque los haya habido, porque no los quiero recordar. La policía y la ambulancia han tardado en llegar y deseo con todas mis fuerzas que aquella señora que susurraba el nombre de su hijo mientras yo esperaba a la ambulancia a su lado esté bien.
Estoy harto de que haya este tipo de cobardes desgraciados en coche por la vida. Ójala los exterminasen.

martes, 8 de enero de 2008

Sin título

Por un poco de vida se postra un reino a los pies del hombre de arena. Tan sólo un pequeño carbón incandescente de esa esencia es suficiente para que el mármol claudique y olvide su condición inmutable. Cosas tan leves como irrefutables e irresistibles son continente de los interrogantes eternos que duermen en núcleos de astros confusos. Retumban disfrazadas de eco y de eco disfrazan recuerdos que recorren puentes entre tierras extrañas. Quizá ese poco de virtud del que hablo es con lo que muchos se envenenan, por lo que muchos han volado a algún estrato onírico perenne... sin posibilidad de regresar a una percepción que rechazan. Y no somos culpables de que esa fiera nos acorrale sin poder sacarla de nuestros pensamientos, porque somos vulnerables presas de nuestro devenir y en él rodamos hacia la duda de lo subjetivamente perseguido y de lo objetivamente rechazado.

miércoles, 2 de enero de 2008

2008, Buen comienzo

"You gonna want me"

Baby,
A song for any season,
I've got so many reasons,
You're gonna wanna make it some day
Some say, boy you're always teasing
I think you best be leaving,
Why you've gotta drive me crazy
I know,
You gonna want me,
But when you want me,
It might be a different story
Baby,
A song for any season,
I've got so many reasons,
You're gonna wanna make it some day
Some say, boy you're always teasing
I think you best be leaving,
Why you've gotta drive me crazy
I know,
You gonna want me,
But when you want me,
It might be a different story.

(TIGA)

--------------------------------------------------------------------------------------

Así he empezado el nuevo año, bailando con la maestría de Tiga. Hace poco que salí de la fiesta de año nuevo, no he dormido demasiado que digamos y me encuentro en el curro con una sensación un tanto desconcertante en mi cabeza, que ha dejado de ser tal para convertirse en chicle, así que no me hago responsable de lo que deje escrito en este post. Bueno, pues ayer empecé nuestra celebración del 2008 comiendo (y bebiendo) con un pequeño escuadrón de gambiteros/as (sois los mejores) de la mejor calaña en casa de Piticlina. No tardamos mucho en bajar al Arena donde se hacía la fiesta de Año Nuevo de Space of Sound 2008 y tampoco tardamos en emborracharnos un poquito. He de decir que no toda la fiesta fue estupenda. Me explico: no sé cuanta gente entrará en el Arena pero la entrada al recinto era pequeña y se formó un tapón de gente (os podéis imaginar que ninguno iba sobrio), que al rato explotó cuando el cuerpo de seguridad (que no estaba nada organizado) se enzarzó en una pequeña trifulca con dos individuos. El asunto se saldó con unos cuantos gritos histéricos por parte de los espectadores y con un par de bofetones y amenazas por parte de los de "seguridad" a los dos homínidos conflictivos. El otro instante agónico fue en nuestro periplo hacia el guardarropía. Una vez más la falta de espacios amplios habilitados en este caso para la cola del guardarropa fue la protagonista... pero a mi no me afectó demasiado porque ya se sabe que al final de un evento de este tipo uno no se encuentra ni cogniscente ni cognitivo. Por lo demás lo que hubo entre medias de la entrada y la salida fue estupendo. Nos enteramos tarde de donde pinchaba Tiga, pero llegamos a tiempo para disfrutar de la mejor zona del recinto, de la mejor música y del mejor ambiente. Mucho baile y muchas risas. Mereció la pena (a ver si alguien sube ya unos videos de la sesión de Tiga al youtube y lo véis). Aquí he de agradecer con todo mi corazón la hospitalidad y simpatía innata de Piticlina que nos ha acogido en su hogar, ofreciédonos lo que estuviese en su mano ofrecernos. Espero que te lo hayas pasado tan bien con nosotros como nosotros contigo, y que no te hayamos dado demasiado la lata. Muchas gracias por aguantarnos y por reírte con nosotros. Gracias por todo, eres una crack y ya sabes que aquí estamos para lo que quieras y para cuando quieras.

Desde que el año pasado (hace un par de días) me comí las uvas invade mi ser un agradable y revitalizante sentimiento de evolución y mejora. Dejo atrás (sin ninguna tristeza) un año que en su recta final se empeñó en que le perdiese el gustito a esto de la vida y en mostrarme que la realidad no siempre es un plato exquisito ni mucho menos. Que son cosas que uno sabe, pero no siempre se es consciente de ello. Pues ahora tengo 363 días para conseguir que este año sea mejor (no creo que eso cueste mucho), de momento he empezado con buen pie y tengo toda la intención de que así continúe. Y para ayudar os dejo el video de la canción que aparece al inicio del post y que en directo ayer me hizo bailar como casi nunca. ¡Que Tiga nos bendiga!